LIBRO [Reseña #7]: Cazadores de Sombras (#4), Ciudad de los ángeles caídos

Nº de páginas: 416 págs.
Encuadernación: Tapa dura
Editorial: PLANETA
Lengua: Castellano
ISBN: 9788408099574

Alguien está dando muerte a los Cazadores de Sombras del círculo de Valentine, y esas muertes enemistan de nuevo a los Cazadores de Sombras con los subterráneos. Sólo Simon, ahora convertido en vampiro, podrá evitar el enfrentamiento. Mientras, Clary y Jace descubrirán un misterio que les llevará a fortalecer su relación o …a destruirla para siempre.
Amor, sangre, traición y venganza... los peligros son mayores que nunca en esta cuarta entrega de la exitosa serie de Cassandra Clare, que retoma la historia donde Ciudad de Cristal la dejó.

En esta cuarta entrega de Cazadores de Sombras, Cassandra Clare ha tratado de expandir su mundo y no quedarse encauzada en los mismo personajes de siempre, consiguiendo así Simon Lewis un protagonismo muy merecido aunque sufrido, cosa que realmente agradezco dado que es uno de mis personajes preferidos. Además, podemos ver una mínima pero importante evolución en la relación Sizzy, ya que pasan de mantener una relación abierta a saber que no pueden vivir el uno sin el otro. Eso sí, me da muchísima pena que Simon, como subterráneo, se sienta fuera de lugar entre los nefilim y que sea reconocido y odiado por ser lo que es, un vampiro, sin ni siquiera haberlo pedido.

Se podría decir que las diferentes relaciones de este mundo empiezan a tomar forma (que ya era hora después de cuatro libros). Cassandra ha decidido dar un descanso a Malec, manteniendo esta relación un poco alejada de sus páginas hasta el momento adecuado. ¿Me alegro por ello? Pues sí. Se le está dando tanto bombo a esta pareja (no me matéis por esto, por favor) que se me está haciendo horrible leer sobre ellos. Es verdad que tienen una relación preciosa y admirable, yo la admiro, pero muchas personas han decidido centrarse solamente en esta relación sin importar la historia, cosa que puede llegar a aborrecer por el simple hecho de no salir del mismo tema. Sin duda, no leer mucho sobre ellos en este libro ha sido de gran ayuda, ya que la autora los ha metido en el momento más adecuado para seguir con la trama del libro así como con la historia de esta relación, mostrando el lado más celoso de Alec hacía la persona que ama.

 

  

Como en los anteriores libros de la saga, en muchas ocasiones no he podido con Clary. Pero, eneste libro ya no ha sido solo con ella, no, no, es que Jace se me ha hecho (en solo parte del libro) muy insoportable. ¿Por qué? Simplemente porque estoy cansada de leerle como la víctima; siempre encuentra cualquier momento para victimizarse. Entiendo perfectamente que lo haya pasado peor que nadie, que se encuentre perdido en cuanto a su pasado y que por ello no sea capaz de encauzar su presente pero, ¿es necesario alejar a todas aquellas personas que se preocupan por él? La respuesta es no. Sin embargo, me ha encantado verle junto a Simon y ser cómplice de cómo su relación va mejorando pero sigue manteniendo esa esencia que la hace tan especial, el humor. Digamos que los momentos con Simon era donde más me gustaba Jace, donde se me ha hecho más soportable y digno de ser leido por sus grandes ocurrencias y ese humor tan negro y sarcástico, en serio.

Los nuevos personajes le han dado un punto positivo a este libro; he adorado a Jordan a pesar de su comportamiento pasado con Maia pero que este intenta solucionar desde el momento en que sabe que destrozó su relación; además, Maia me ha gustado bastante porque me ha parecido un personaje muy real, se siente dolida por la traición de Simon y lo muestra perfectamente, pero le sigue importando tanto Jordan que es capaz de darle una segunda oportunidad siempre y cuando este esté dispuesto a darle tiempo; Camille, a la cual ya conocía por el primero de Los Orígenes y que no ha estado del todo mal leer nuevamente ya que es una de las culpables del protagonismo de Simon y la vuelta de Malec.

Se podría decir que no es un libro predecible porque tiene unos giros muy buenos y bien formados, sabes que hay un villano pero siempre te hace dudar entre diferentes personajes o ideas, hasta que caes en la secuelas de los anteriores libros, los cuales tienen uns finales bien formados y, mayoritariamente, cerrados. Sin embargo, eso cambia en este libro, el cual deja un final totalmente abierto provocándote ganas de continuar con el siguiente. 

También es verdad que la forma de escribir de Cassandra Clare se hace más ágil, ligera y, por lo tanto, llevadera; no sé si es porque el protagonismo de Clary se pasa a Simon o simplemente porque Cassandra ha mejorado su pluma, pero me alegro de ello ya que hasta ahora no había sido capaz de dejarme enganchada a uno de sus libros. 

En resumen, a pesar de no ser mi libro preferido de la saga (de momento es el tercero de la saga original) y de que los personajes que siempre han solido mantener el protagonismo decaen un poco y me desesperan, tiene una trama magnífica con giros importantes que te deja con ganas de más.
 

 4/5