miércoles, 25 de noviembre de 2015

PELÍCULA [Crítica]: Los Descendientes

Sinopsis
En el reino de Auradon, el Príncipe Ben – el benevolente hijo adolescente del Rey Bestia y la Reina Bella – se está preparando para ocupar el trono. Su primer anuncio: ofrecerle una oportunidad de redención a los hijos de los villanos: Cruella De Vil, Maléfica, la Reina Malvada y Jafar. Todos ellos están prisioneros en la Isla de los Perdidos desde que el Rey Bestia asumió el poder.
Estos descendientes adolescentes (Mal, Carlos, Evie y Jay) son admitidos en la prestigiosa Preparatoria Auradon junto a príncipes y princesas del reino.
A pedido de Maléfica, los descendientes deberán robar la Varita Mágica del Hada Madrina, para entregarla a sus padres y que se restituyan en el poder. ¿Lo lograrán?

Tras mucho tiempo de espera y decepción en cuanto a Disney Channel y la falta de magia con la que tanto se caracterizaba, soy capaz de decir que con Los Descendientes han sido capaces de recuperar un poco de ella y es que se nota muchísimo que esta película está dirigida por el incomparable Kenny Ortega, creador de una de las mayores franquicias del mundo Disney como es High School Musical.
No quiero comparar, por supuesto que no, si es que ni siquiera existe similitud alguna entre ambas películas, en cuanto a la historia se refiere; sin embargo, la esencia de Kenny está presente, la antigua esencia de Disney ha vuelto a relucir después de tanto tiempo. Esa importancia por la amistad, el amor, la magia y la familia; saber diferenciar entre el bien y el mal; conseguir que personas tan malvadas como los hijos de los mayores villanos Disney sean queridos y que estos mismos comprendan la verdadera importancia de la situación: el entendimiento y la comodidad de uno mismo, sentirse querido por una vez y para siempre. Estos son valores que se han recuperado y de una forma inigualable, que ya hacía falta.
Puede que los personajes y sus respectivos actores también influyan. Sinceramente, pienso que Dove Cameron es lo único bueno que hay hoy en día en esta compañía porque de verdad que este canal ha perdido mucho incluso en cuanto a sus series, y ya ni hablar de sus actores, se libran tan solo unos pocos de los que ni siquiera me atrevo a hablar porque pienso que no me merece la pena porque ya no lo sigo como antes ni pretendo hacerlo (¡Vuelve 'Magos de Waverly Place!) Y, bueno, como bien iba diciendo sobre Dove Cameron, su personaje, Mal, ha sido mi preferido. Los cuatro personajes protagonistas evolucionan muy bien durante la película y eso me encanta, sobre todo por la ayuda que se ofrecen entre ellos y, al final, entre todos los del reino.
Ahora bien, la BSO es perfecta. Sus canciones son muy pegadizas y los bailes que vienen de la mano de Kenny Ortega (como no, cosa que se nota muchísimo) son admirables.
Al ser una película que consta de personajes Disney, no lo han adentrado demasiado en el tema 'musical'; con esto me refiero a que, sí, hay canciones como en toda película Disney, pero de una forma moderada y nada pesada para el espectador (cosa que mucha persona agradece, aunque a mí no se me hace pesado, pero bueno, lo hubiera podido soportar). Kenny ha hecho bien al decidir centrarse en la historia y no en tanto canto y baile.

Por último, decir que estoy esperando con muchas ganas la segunda parte de esta película que ya ha sido confirmada. 

 4/5




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